Los ripios de Pilar Sánchez Vicente en la despedida de Christina
El pasado sábado, durante la cena de fin de temporada del Club, se comunicó a los jugadores y aficionados que se encontraban presentes en el Restaurante Savanna que la próxima temporada no estaría con nosotros Christina Klein defendiendo la portería del HOSTELCUR GIJÓN H.C. Allí, por parte de sus compañeras de equipo y del propio Club, se le hicieron unos regalos, pero además Pilar Sánchez Vicente se subió al escenario para recitar unos ripios compuestos para la ocasión, teñidos del buen humor al que nos tiene acostumbrados y que son una pincelada de lo que supuso el paso de Christina por el BIESCA, por el HOSTELCUR y por la ciudad de Xixón. Los ripios dicen así:
Corría el añu 2006
cuando nel Biesca Xixón
aterriza una portera,
alemana por más señes,
que encandila a la afición.
Christina Klein se llamaba
y fue nel campus de Grao,
faciendo una parrillada
cuando el Presi tuvo el placer
de darle la bienvenida,
sin saber que nestos años
faríase de la familia.
Llegó con Marta Soler
y venían las dos fieras
de competir en lo alto
de la Liga Portuguesa.
¡Era una comedia oila
chapurrear portugués
con fuerte acentu xermanu!
Llingua amestá a la que en breve
añadiría l’asturianu.
Porque ella integrose pronto,
pese a su imagen serena
cuando hay que salir de fiesta
apuntase la primera
y nunca la vi negase
a un culín… ¡ni a una botella!
Durante estos nueve años
diolo todo por el club,
entrenando a los porteros
y ganando pa la causa
con chuches a los pequeños,
que adoraben a Christina
–comu yera el casu d’Héctor-
y disfrutaben xugando
fueren ganando o perdiendo.
Siempre fue una golosona
y si queríen motivala
gritaben-y ¡¡Chocolate!!
cuando a la pista saltaba
que fue lo que-y dixo Dani
el primer día p’animala.
Tien la mi Chris una mata
de pelo, más que melena,
que doma debaxu’n gorru
y que nos dexó una anécdota
que val la pena contar:
Había ido a Cataluña
el nuestru equipu a xugar
y como diben con tiempu
quisieron dir a cenar,
menos la nuestra Christina,
que se quedó dientru’l coche
a echar la cabezadina.
Taba aparcaú el vehículu
nun parking de la ciudá,
ella reclinó l’asientu,
tapóse con una manta
y solo yera visible
de fuera el gorru de lana
tal cual parecía un bebé
que algún malpadre dexara
y taba a puntu morrer.
Eso fue lo que creyó
un matrimoniu que pasaba
y corrió a avisar al guardia
del sustu que se llevara,
creyendo vivir un casu
de Sálvame en directo,
menos mal que hubo suerte
aclarose el entuertu
y no dio en comisaría
la probe Chris colos huesos.
Del so cálter diznos otra:
en la copa de Coutrás
llegaron a los penalties
y a la xente, acoyonada,
temblaben-y hasta les pates.
No a la portera, no,
que patinó hasta la valla
y dixo a Fernando Sierra
mientras se –y reía a la cara.
“Esto ye una puta mierda
y nos vamo a ganala”
Con la Klein en la plantilla,
una imbatible portera,
ganó El Biesca la Ok Liga.
Y cuatro Copas de Europa
conquistarían las féminas,
aumentando el palmarés
dos Copas más de la Reina.
Y los reyes recibieron
a les reines de Xixón
y salimos al balcón
en Begoña 2009
p’abrir la Semana Grande
dando el pregón de les fiestes..
Y había que veles señores,
que felices les mis neñes,
que orgullo y satisfacción
pa todos los habitantes
de la Villa de Xixón,
sobre tóo pa les muyeres.
Grandes recuerdos nos dexes,
tantu cariñu te lleves.
Durante estos nueve años
siempre que nos la jugamos
estaba Christina Klein
defendiendo bajo palos
con fuerza, seguridad
y un empuje contagiosu
que animaba a les demás.
Pero no solo en la pista
su cometido cumplía,
en lo referente al club
y la peña Los Rodaos
-este es mi equipo,
esta es mi gente-
ella fizo los carteles,
logos, iconografía
diseñó les camisetes,
en fin, que ye una artista
y no solo en artes plásticas,
en gemes y orfebrería
que ye colo que la probe
pudo ganase la vida,
pues ya sabéis que los sueldos
de deportes minoritarios
anden tirando a pequeños.
La cosa ye bien cenciella:
tu das-y una semeya
y ella troquelala en plata
y faete la silueta
pa que la lleves colgada,
pué ser tamién un patín, stick
o lo que te venga en gana.
Que fuera portera hockey
mamolo desde pequeña,
pues fuera también porteru
su padre, el querido Hermann,
fan del Borussia de Dortmund
y amante de la cerveza,
que estuviera delles veces
de visita nesta tierra.
Como la fía, buen paisanu,
tan afable y campechanu
aunque no nos entendiera
que’l primer día lu adoptamos
y unu más del grupu era.
Destacaría de Christina
su sonrisa permanente,
su buen humor y su entrega,
sus palabras para todos,
la suavidad de su trato
y ese espíritu de lucha
que nos llevaría tan alto.
Te vas, pero no nos dexas,
porque nunca olvidaremos
ese pelo ingobernable,
esa carina risueña
y la huella que marcaste
no solo en tus compañeras
sino en todo el que trataste.
Nos diste mucho Christina,
vamos a echate de menos
y cuando tes n’Alemania
y la morriña te venza,
recuerda que te queremos,
deseámoste lo meyor
y siempre tendrás tu casa
nel Hostelcur de Xixón.