Aniversario IX: El día que ganamos el desfile del Antroxu
Si hubo algo que desde el principio caracterizó a nuestro Club fue su afición que pronto sería reconocida por el mundillo hockístico. Una afición que animaba, apoyaba, viajaba, se divertía, compartía y disfrutaba con los equipos del Solimar. Fruto de las relaciones personales surgidas y de la capacidad organizativa y técnica de algunas personas surgió la participación en el desfile del Antroxu gijonés.

Aunque en los primeros años de actividad del Club ya se había participado en algún desfile, fue la iniciativa personal de Ángel Alonso la que dio forma a un nuevo modelo de participación con la cesión por parte del Ayuntamiento de una nave y una plataforma para la construcción de una carroza que, durante varios años, constituyó un punto de encuentro de la gente para la realización de los trabajos.
Normalmente la tarde-noche de los viernes era el momento elegido para acudir al polígono en el que estaba la nave y trabajar en el diseño de la carroza de acuerdo con la temática elegida para cada año, pero como es habitual en todas las actividades del Club la parte lúdica tenía una importancia muy grande y siempre había un paréntesis para compartir una cena entre todos los que había acudido. Tortillas, empanadas, frixuelos, picatostes, cafés, cervezas y, claro, unes botelles de sidra.

Después de haber participado ya en varios desfiles y haber adquirido cierta experiencia, en el año 2012 se decidió que la temática iba a ser la circense (siempre se buscaba un tema que resultara fácil y barato para las familias). Pablo Puig pondría todos sus conocimientos técnicos para hacer una carroza imbatible que nos pusiera en el camino de la victoria en el desfile y poco a poco, semana a semana “El Gran Circo del BIESCA” fue tomando forma hasta convertirse en una magnífica representación de una pista de circo.

El día del desfile, la carroza, remolcada por el tractor de Marcelino Cadrecha que siempre lo aportó con generosidad, llegó a las inmediaciones del estadio de El Molinón para iniciar la marcha. La gente del BIESCA llenaba de color con sus disfraces el entorno de la carroza, el equipo femenino había quedado campeón de la Copa de la Reina el día antes y se incorporaba también al desfile copando la atención de los medios de comunicación y los gemelos, Luis y Fernando, serían la gran atracción haciendo el número del “hombre bala” (uno se metía en un cañón que llevaba la carroza y, tras un “disparo”, el otro aparecía entre el público entre grandes ovaciones).

Con todo ello no fue de extrañar que el día de la entrega de los premios nuestra carroza y nuestro grupo fueran galardonados con el primer premio que recogerían en el escenario del Paseo Begoña, los gemelos acompañados por Isidoro, “El Peke”.
